Lo qué debes saber sobre la hepatitis aguda infantil

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha identificado hasta el 27 de mayo 650 casos de hepatitis aguda infantil en 33 países, detalló que 9 de los niños fallecieron y 38 necesitaron un trasplante de hígado. Además, tres cuartas partes de los casos se han dado en niños menores de 5 años.

¿Por qué es extraño este brote de hepatitis aguda?

Si bien la hepatitis no es un padecimiento desconocido, lo que ha encendido los focos de alerta en el mundo es el incremento significativo de casos que presentan complicaciones, y que aún no se sabe con certeza qué la contagia ni cómo y por lo que todavía no hay medidas específicas para frenarla.

María Wong Chew, jefa de la Subdivisión de Investigación Clínica de la Facultad de Medicina de la UNAM, explica en un texto publicado por la Gaceta UNAM que “los adenovirus son virus que normalmente circulan entre los humanos y causan durante todo el año, diversos padecimientos; como, infecciones respiratorias, gastrointestinales, de la vejiga (cistitis) y de los ojos (conjuntivitis).

Los adenovirus que invaden las vías respiratorias se transmiten por medio de las gotículas que son expulsadas a la hora en que una persona infectada tose o estornuda; en cambio, los gastroinenterales se transmiten por la vía fecal-oral, igual que las bacterias, los parásitos y otros virus que dan origen a múltiples infecciones gastrointestinales” .

Respecto a este brote de hepatitis aguda grave, la especialista añade que “en algunos casos de esta enfermedad sí se han identificado adenovirus”; sin embargo, en otros no. Por eso la Organización Mundial de la Salud (OMS) la ha denominado hepatitis aguda grave de etiología desconocida. Es decir, ninguno de los agentes virales habituales de la hepatitis A, B, C y E se ha encontrado infectando a los niños en el brote actual.

Actualmente se sigue investigando la asociación entre la infección por adenovirus y los casos actuales de hepatitis aguda. Además, se ha descartado que las complicaciones estén relacionadas con padecimiento previo de Covid-19 o por haber recibido la vacuna contra el SARS-CoV-2.

Mantente alerta de los síntomas

Por lo regular la hepatitis A, la más frecuente en niños es una infección benigna y la mayoría de las veces asintomática. Los infantes pueden presentar ictericia, es decir, una coloración amarilla en el cuerpo y los ojos y aunque experimentan malestar general y cansancio extremo, al cabo de unos días se sienten bien.

En los casos actuales, aunque dentro de los síntomas está la fatiga, malestar general, fiebre, ictericia, orina oscura y materia fecal grisácea, también pueden darse náuseas, vómitos y diarrea, algo que no se ve en otros tipos de hepatitis.

“Si un niño menor de 16 años se muestra cansado, apático, sin ganas de moverse o tiene ictericia, dolor abdominal, diarrea, náuseas y vómitos, debe ser llevado de inmediato al médico para que lo valore y le mande hacer una prueba de la función hepática”, recomienda la especialista de la UNAM Wong Chew.

Cómo proteger a los niños de la hepatitis aguda

Además de estar atento a los síntomas de la hepatitis, es importante tener algunas medidas de prevención y buenos hábitos de higiene.

  • Lavarse las manos antes y después de preparar los alimentos y después de ir al baño o de cambiarle el pañal a un bebé.
  • Cubrirse con un pañuelo desechable la nariz y la boca a la hora de toser o estornudar.
  • No compartir alimentos, bebidas, cubiertos y platos.
  • Limpiar y desinfectar perfectamente los juguetes y los objetos que manipulan los niños en las guarderías.
  • Tomar agua filtrada, hervida o embotellada.
  • Desinfectar o lavar las frutas y verduras crudas con agua y jabón.
  • Comer alimentos cocidos.
  • Tener completo el esquema de vacunación contra la hepatitis A y la hepatitis B.

Recuerda que el hígado es un órgano vital que procesa los nutrientes, filtra la sangre y combate las infecciones. Si está dañado o inflamado, distintas funciones pueden verse afectadas y desencadenar padecimientos fatales.

El Covid-19 nos enseñó la prevención y cómo mantenernos seguros de infecciones. Sigue las recomendaciones de los expertos y disminuye al máximo el riesgo de que los niños de tu guardería contraigan esta enfermedad.