La música en el desarrollo de los niños

Interactuar con la música y el baile en la educación de la primera infancia, que va de los cero a 6 los años, debe ser parte de la vida cotidiana de un niño.

La investigación sobre música para niños durante la última década revela los efectos positivos en el desarrollo. El compás, el ritmo y el tempo estimulan sus mentes, fomentando el reconocimiento de patrones y la discriminación auditiva.

De acuerdo con el centro de desarrollo infantil Petit Early Learning Journey, estos son algunos de los beneficios de la música para niños menores de cinco años contribuyen con:

· Su crecimiento cognitivo: cómo piensan, exploran y resuelven las cosas.
· El desarrollo de habilidades para resolver problemas, como la lógica, el razonamiento y la secuenciación.
· Autoexpresión: cómo comunican sentimientos, ideas y pensamientos a través de la música, el movimiento o tocando un instrumento.
· El desarrollo de habilidades físicas como la coordinación, la conciencia espacial y el equilibrio.
· Habilidades sociales como la cooperación, tomar turnos y compartir la experiencia musical de aprender a bailar y tocar instrumentos con otros.
· La regulación de sus emociones aprendiendo a calmarse, relajarse y controlar sus sentimientos.
· Ampliar su lenguaje. Cuando cantan canciones juntos, incluso canciones infantiles sencillas, la experiencia musical con movimiento estimula todas las áreas del desarrollo del cerebro.
· Hace crecer su imaginación. En lo profundo de la mente de su niño pequeño, la música puede llevarlo a lugares en los que nunca antes había estado. Tocar instrumentos musicales les da a los niños pequeños la oportunidad de hacer música, una experiencia poderosa para los niños pequeños.
· Mejorar las habilidades motoras con el movimiento. Los niños pequeños disfrutarán gateando en el piso, marchando en el mismo lugar o subiendo y bajando escaleras con música y experiencias de movimiento.

Actividades de música para bebés
El experto en música, el doctor Ibrahim Baltagi, en una mini clase que impartió a padres a través de Unicef.org, afirmó que un niño por nacer comienza a escuchar música entre las 16 y las 18 semanas. Después del nacimiento, la música puede estimular todas las áreas del desarrollo del cerebro. Los bebés pueden reconocer sonidos familiares y desarrollar su creatividad e imaginación. Promover el movimiento musical desde bebés es posible, basta cargarlos y moverse al ritmo de la música.

Actividades de música para niños pequeños
Los niños se benefician de las actividades de música y baile porque están llenos de energía. La música proporciona una forma didáctica para que gasten sus energías.

Los programas de aprendizaje para niños pequeños deben incluir experiencias como:

· La mayoría de los niños pequeños disfrutan cantando canciones y rimas conocidas.
· A medida que se desarrollan, puedes alentarlos a tocar un instrumento como tambores, panderetas o agitar maracas, instrumentos fáciles de agarrar y sacudir que además les ayuda a desarrollar sus habilidades motoras finas.
· También puedes fomentar la apreciación musical reproduciendo música durante los cambios de pañales, a la hora de dormir o iniciarlos en la meditación.
· A los niños les encanta moverse, y agregar música a la clase brinda la oportunidad perfecta para tener experiencias diseñadas para ayudarlos a familiarizarse con la música.

Fomenta la autoexpresión creativa de los niños e introduce la música y el baile en las actividades diarias de tu guardería.


La importancia de realizar constantes evaluaciones de riesgos

La evaluación de riesgos es una excelente estrategia de prevención que te ayuda a disminuir accidentes y lesiones mediante la identificación de posibles peligros.

En otros textos te hemos explicado cómo la identificación de riesgos en tu guardería es parte importante de la prevención, pero esto no debe quedarse en esa única evaluación, que generalmente se realiza cuando es la apertura de un centro de cuidado infantil o al contratar una póliza de RC. Hacer observaciones continuas también es parte de la administración de riesgos y una pieza clave.

¿A qué nos referimos con estas evaluaciones constantes? No hay nada mejor que identificar algún riesgo que estar en los espacios, usarlos y observarlos. Por eso, para esta tarea de continuidad es importante que todo el personal que forma parte de la guardería o estancia infantil se involucre. Desde nanas, personal del filtro de entrada y salida, cocineros, personal de limpieza y de seguridad. Fomenta en ellos esta atención plena en los espacios, organiza reuniones periódicas para platicar hallazgos y dar seguimiento a los reportados

Al tener tantos ojos atentos al entorno se pueden ubicar posibles áreas de oportunidad. Todos deben ser conscientes de cualquier peligro en el entorno de trabajo para minimizar o prevenir accidentes y lesiones. Toma en cuenta que las evaluaciones no tienen que centrarse en los espacios cerrados, es importante observar las áreas exteriores como patios de juego, chapoteadero, arenero e incluso la zona de recepción de los niños.

Estas son las áreas y momentos en los que te sugerimos mantener evaluaciones de riesgos continuas:

  • La llegada y salida de los niños.
  • Ir al baño.
  • Jugar al aire libre.
  • El área interior en general.
  • Lavado de manos y dientes.
  • Hora del comedor.
  • Juegos con agua y arena.
  • Bebés/niños con necesidades especiales.
  • Miembros del personal embarazadas.

El objetivo de estas evaluaciones es que los riesgos se controlen y revisen con regularidad, ya que pueden ocurrir cambios, por ejemplo, nuevos equipos en la guardería, tal vez el cambio de sala de ciertos grupos o la llegada de nuevo material didáctico.

  • Peligros.
  • Identificar quién está en peligro de ser herido.
  • Identificar el nivel de riesgo.
  • Qué acción se requiere para minimizar el riesgo.
  • Registrar los hallazgos.

Con esto, puedes dar un seguimiento puntual y ampliar los hallazgos de una primera evaluación que hubieras realizado en tu centro infantil.

Recuerda que en tema de prevención de riesgos nunca es suficiente.